Los muebles lacados son auténticas piezas de arte que permiten convertir cualquier estancia en un entorno más atractivo. Sin embargo, a la hora de limpiar estos muebles para que mantengan su belleza, es necesario que de forma regular se haga una limpieza adecuada.
A lo largo de este artículo, conoceremos valiosos consejos para limpiar este tipo de muebles de forma eficaz, manteniendo el brillo y encanto que los caracteriza.
¿Qué son los acabados lacados?
Ante de comenzar con los consejos, es necesario, que conozcamos que es un acabado lacado. Pues bien, este acabado se caracteriza por el empleo de una o varias capas de barniz duro que se aplica en la superficie de madera de algún mueble. Este barniz no solo mejora la apariencia del mueble sino que también protege a la madera de daños y del desgaste.
Para conseguir este acabado es necesario ser muy minucioso, además de ser necesario contar con ciertas habilidades para lograr un resultado perfecto. Es por ello, que cuando vayamos a limpiar los muebles lacados, debemos tener un gran cuidado para no dañarlos, además de asegurarnos de que la limpieza sea suave y eficaz.
Materiales suaves y apropiados
A la hora de escoger los materiales más adecuados para una limpieza, resulta esencial evitar aquellos que sean abrasivos. Así, en lugar de paños ásperos o esponjas rugosas, se deberá optar por trapos suaves cuyos materiales sean microfibra o algodón. Con el uso de estos últimos se garantiza una limpieza suave y delicada.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es que los productos sean suaves y además no contengan sustancias químicas que puedan ser agresivas con estos muebles, dado que pueden dañar o incluso decolorar los lacados.
Limpieza de forma diaria
Mantener una limpieza diaria resulta esencial para mantener la frescura de este tipo de muebles. Tanto la acumulación de polvo como de suciedad pueden acabar ocultando la verdadera superficie del mueble, pudiendo incluso en algunos casos dañarla.
Para realizar esta limpieza simplemente pasa un paño suave humedecido por la superficie de los muebles para recoger el polvo y la suciedad acumulada. Luego con un paño seco, pasalo por encima de la superficie para secarla.
Elimina suciedad con suavidad
Como ya hemos mencionado, realizar una limpieza de forma diaria es esencial para mantener la belleza de los muebles lacados. Sin embargo, en algunas ocasiones mientras realizamos está limpieza podemos encontrar marchas que son más persistentes.
Para eliminar este tipo de manchas, es recomendable mezclar un poco detergente con agua tibia, sumergir un trapo de algodón o microfibra, exprimirlo y luego pasarlo por la superficie en la que se encuentra la mancha, mediante movimientos circulares. Durante estos movimientos, es vital que no ejerzas demasiada presión, dado que puedes ocasionar arañazos. Tras eliminar la mancha, pasa un trapo seco para secar la superficie.
Evita el sol y la humedad en los muebles lacados
Tanto la exposición solar directa como una humedad excesiva en la superficie de este tipo de muebles puede acabar dañándolos gravemente. Una exposición solar intensa puede ocasionar una decoloración y acabar afectando a la superficie barnizada. Para evitarlo, se debe colocar los muebles en un lugar donde no estén expuestos a una luz solar directa o emplear cortinas, persianas o similares para minimizar dicha exposición.
Por otro lado, una excesiva humedad también puede causar daños importantes a los muebles lacados, como las deformaciones o decoloraciones en dichos muebles. Si colocamos este tipo de muebles en entornos propensos a la humedad, es muy posible que aparezca moho en ellos, siendo esto perjudicial para ellos. Para evitarlo, se recomienda mantener una humedad adecuada en las estancias en las que se encuentran estos muebles.
Cuidado especial para arañazos
Aunque con el paso del tiempo, es inevitable que aparezcan arañazos o otros tipo de señales de antigüedad, si hay formas eficaces para tratarlos. En el mercado actual podemos encontrar diferentes productos específicos para disimular los posibles arañazos que puedan aparecer de forma efectiva.
Este tipo de productos son los rellenos de retoque, productos que como hemos dicho son específicos para tratar arañas en los muebles lacados. Estos rellenos se debe aplicar de forma cuidadosa sobre los arañazos y seguir las instrucciones específicas de cada uno de los productos para obtener unos resultados óptimos. Tras dejar secar el relleno, se debe pasar un paño suave para limpiar la superficie.
Este tipo de muebles suponen para muchas personas una gran inversión económica por lo que es necesario cuidarlos y mantenerlos con esmero. Esta serie de consejos te ayudaran a mantener una correcta limpieza para mantener la belleza y el encanto de estos muebles durante largos períodos de tiempo.
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