Seguro que muchos habréis pensado alguna vez en dar un nuevo aspecto a vuestros muebles. Aquí entra en juego la pregunta clave de cuál es el tratamiento que más se adecua a nuestro mobiliario o cuál es el más indicado para alcanzar el resultado esperado.
Existen diferentes cosas que podemos hacer para conseguir tal cometido como, por ejemplo, barnizar, pintar, lacar o decapar. Aunque lacar, barnizar y pintar puedan parecernos similares la realidad es que existen numerosas diferencias que requieren de productos y procedimientos distintos. Y, por supuesto, dan lugar a resultados también muy diferentes.
Por eso en este post queremos explicaros en qué consiste el lacado y el barnizado para que así podáis saber qué es lo que más le conviene a vuestros muebles y qué tratamiento tenéis que escoger en función del resultado final que queráis obtener.
Diferencias entre lacado y barnizado
Tanto lacar como barnizar sirven para fortalecer la madera y dar un nuevo aspecto a nuestros muebles. Sin embargo, en la resistencia que ofrecen a la madera ya encontramos las primeras diferencias ya que en este caso el barnizado ofrece una mayor fortaleza con respecto al lacado a la hora de resistir condiciones adversas como las altas temperaturas o el agua. Por este motivo para los muebles de exteriores se recomienda el barnizado.
En el acabado también obtenemos resultados dispares en función del producto que empleemos. Mientras que el barnizado resalta las propiedades de la madera y permite apreciar mejor el veteado de la misma sin aportar color como tal, el lacado ofrece un acabado liso que en este caso sí que aporta color al mueble pudiendo elegir entre acabados mate o con diferentes grados de brillo.
Por tanto, el barnizado es un producto transparente que permite mejorar el aspecto de del mueble sin modificar su color original, aunque también se pueden emplear barnices con colores de diferentes tonos de madera. Pero en cualquier caso se seguiría viendo la madera. Y el lacado ofrece la posibilidad de transformar en mueble dándole el color que queramos.
Pasos para lacar y barnizar
En cuanto al procedimiento para aplicar un producto u otro también se dan diferencias. El lacado se lleva a cabo, generalmente, mediante pulverización por pistola o en cabinas, y los pasos a seguir son: lijar el mueble, aplicar una base selladora, lijar de nuevo la superficie, dar una capa de producto, lijar y aplicar otra capa de color.
En el caso del barnizado, también hay que lijar inicialmente la superficie de la madera, aplicar una base selladora y después se procede a barnizar empleando una pistola y siguiendo la dirección de la veta. Al igual que en el lacado se puede volver a lijar y aplicar una segunda capa.
Principales dificultades
En ambos procedimientos es muy importante respetar los tiempos de secado óptimos entre paso y paso para conseguir un buen resultado. Además, de contar con una buena técnica para lograr un acabado liso y uniforme.
Aunque pueda parecer una tarea relativamente sencilla lo cierto es que no siempre lo es por lo que desde Barnizados La Mina os recomendamos que siempre acudáis a un profesional que pueda aconsejarte sobre qué tratamiento se ajusta a vuestras necesidades. Y que os ofrezca la garantía de un resultado de calidad.
Si estás pensando en dar un nuevo aspecto a tus muebles no dudes en contactar con nosotros, estudiaremos tus muebles y juntos conseguiremos la nueva imagen que desees a tu mobiliario.